En España entre el 7,2 y el 10% de los recién nacidos son prematuros (nacidos antes de la semana 37 de gestación) y el 1,2% nacen con menos de 28 semanas y son extremadamente grandes prematuros. El perÃodo comprendido entre las semanas 23-24 (desde que es viable) y 36 es clave para que el feto gane peso y, por tanto, cuando el nacimiento se produce de manera prematura, el suministro de nutrientes intrauterino es interrumpido. Por ello, la nutrición tiene una función esencial en el manejo de estos neonatos, que precisan de un aporte rápido de todas las sustancias que reciben cuando se encuentran en el útero materno con el fin de alcanzar un crecimiento postnatal adecuado y evitar complicaciones.
“La nutrición en estos neonatos no es una dieta, es un tratamientoâ€, asevera MarÃa Luz Couce, jefe del Servicio de NeonatologÃa del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela (CHUS) y coordinadora del curso online que ha organizado Nutricia Advanced Medical Nutrition, que está avalado por la Sociedad Española de NeonatologÃa.
Los estudios realizados en los últimos años y la experiencia atesorada por los especialistas han demostrado que la nutrición repercute no solo en la situación inmediata del bebé, sino también a largo plazo: “Es un factor importantÃsimo que favorece que ganen peso más rápido, mejore el cociente de desarrollo y disminuyan las infecciones y otras comorbilidadesâ€, apunta Couce.
Comienzo precoz de la alimentación enteralOtros aspectos decisivos tienen que ver con la administración de proteÃnas y el comienzo precoz de la alimentación enteral, sobre todo en los grandes prematuros, que tienen enzimas y un tracto digestivo inmaduro, lo que inicialmente aboca a una nutrición parenteral. Sin embargo, en los últimos años se ha producido un cambio de paradigma y estos bebés no sólo reciben glucosa cuando llegan al mundo: “Ahora, ponemos también proteÃnas parenterales desde el dÃa cero porque impacta en su composición corporalâ€. Las proteÃnas contribuyen a que el recién nacido gane peso, longitud y perÃmetro craneal, lo que a la postre deriva en un mejor desarrollo cognitivo.
De hecho, un estudio realizado en Reino Unido con niños de entre 7 y 8 años ha confirmado que entre los que habÃan recibido suplementación temprana de proteÃnas, habÃa menos casos de parálisis cerebral.
Además, la coordinadora del curso recomienda instaurar la alimentación enteral lo antes posible porque favorece la aparición de microbiota saludable, evitando la atrofia y ayudando a la maduración intestinal: “Lo ideal es hacerlo con leche materna y, cuando esta nutrición ya se aporta en una cantidad significativa, es necesario fortificarla, añadiendo otros ingredientes, sobre todo proteÃnas y mineralesâ€.
Los especialistas han de dominar los patrones de crecimiento y la identificación de los biomarcadores que evalúan el estado nutricional
Según la jefa de NeonatologÃa del CHUS, los especialistas han de tener un manejo excelente de los nutrientes que necesitan estos recién nacidos, deben conocer los patrones de crecimiento e identificar bien los biomarcadores que evalúan el estado nutricional del prematuro: “Cada vez lo vamos haciendo mejor y vamos tomando conciencia de lo esencial que es la nutrición, pero es bueno actualizar la formaciónâ€.
Y actualizar e incrementar esos conocimientos es precisamente el objetivo del curso de Nutricia que coordina MarÃa Luz Couce y titulado “Qué debemos saber sobre la nutrición de nuestros niños prematurosâ€. Está dirigido a neonatólogos y pediatras de toda España y está formado por seis módulos.
The post La nutrición en los prematuros y grandes prematuros es un tratamiento, no una dieta appeared first on Diariomedico.com.